Endometriosis: La endometriosis es la base de mucho de los problemas de infertilidad, además de causar graves dolores pélvicos y trastornos menstruales, así como afectaciones generales de salud, se estima que aproximadamente el 40% de las mujeres con dificultades para lograr un embarazo, tienen endometriosis.
Síndrome de ovario poliquístico: El síndrome de ovarios poliquísticos, provoca irregularidad menstrual, principalmente menstruaciones poco frecuentes o falta de menstruación, pues evita la ovulación.
Fallo ovárico prematuro: Se considera menopausia precoz cuando la regla se pierde antes de los 40 años, una mujer pierde su fecundidad unos 6 años antes de perder la menstruación. Esta condición no puede ser prevenida ni predicha.
Causas hereditarias: Pueden deberse a anomalías cromosómicas o genéticas, que causarán comúnmente afectaciones en los óvulos, que les impedirán lograr una fecundación o producir un
embrión saludable. Estas pueden ser muy variables.
Anomalías del útero: Defectos de la formación del útero pueden ocurrir en el cérvix o cuello, el cuerpo del útero, como tabiques uterinos, pólipos, miomas, endometriosis o cicatrizaciones
internas llamadas adherencias, que pueden pegar las paredes del útero. Todos estos defectos del útero lo distorsionan anatómicamente y dificultan la implantación.
Aunque padecer estas malformaciones, no necesariamente llevarán a la infertilidad.
Factor tubárico: La fecundación de un óvulo en el cuerpo de la mujer, ocurre en el interior de la trompa de Falopio, por lo que si tienen anomalías, puede interrumpir el paso de los espermatozoides para su encuentro con el óvulo o para la llegada de un embrión al interior del útero para su implantación. Las anomalías de las trompas son hidrosalpinx, que es la colección de pus en la trompa, oclusión tubárica, que es la obstrucción de las trompas y la salpingitis, que es la inflamación de las trompas.
Factor edad: Después de los 35 años la fertilidad de la mujer decae considerablemente. La edad fértil ideal, ocurre alrededor de los 23 años. Cercanas a esta edad, a penas un 5% de mujeres presentará problemas para concebir y a partir de ahí comienza un declive, de manera que a los 37 años, 30% de las mujeres presentará problemas para concebir, pues la reserva ovárica se ve disminuida, pero también la calidad de los cromosomas del óvulo, por lo que aumentará también la ocurrencia de abortos y problemas cromosómicos fetales. Aunque no hay manera de prevenir las afectaciones de los óvulos por el paso del tiempo, la exposición a malos hábitos como el tabaco y el alcohol, a la contaminación etc. acelera la afectación de la salud y viabilidad de los óvulos.